Revisión de la historia antigua de Israel

[Josemari]

Hola a todos.

Sinceramente creo que hay que empezar a poner en cuestión la historia antigua de Israel tal y como nos la transmite la Biblia. Hagamos abstracción de los datos de ese texto religioso y qué nos ofrecen los datos arqueológicos sobre el éxodo, el "glorioso" reinado de David y el de su hijo, ni tan siguiera del de Roboam, supuesto enemigo del fundador de la XXII dinastía, que al registrar su triunfo en Palestina menciona multitud de ciudades y no aparece por ningún lado un reino de las dimensiones de Juda o Israel, ni a Roboam o Jeroboam ni algo que se le parezca. Es que alguien puede creer después de ver la resistencia de Egipto a entregar princesas a los reyes asiáticos, sus "hermanos", en la epoca de Amarna, los de la XXI dinastía que habían invadido filistea vayan y entreguen a una princesa a Salomón, de la que la Biblia ni menciona el nombre. Y cómo en el apogeo de la XIX dinastía, en el reinado de Ramsés II en el que se sitúa habitualmente, cuando las rutas del Sinaí estaban fuertemente controladas por Egipto, que explotaba las minas de cobre de Timna e intervenía militarmente ni más ni menos que en Moab y Seir, se iba a producir un éxodo a lo Cecil B. DeMille.

Creo que hay que distinguir entre las creencias religiosas que cada uno tenga y la asunción al pie de la letra de la Biblia, texto que no tenía una finalidad de crónica histórica sino explicación de la historia a la luz de la interpretación que la casta sacerdotal y la corte hacían de la misma.

Recomiendo la lectura del libro de Israel Finkelstein y Neil Asher Silberman "La Biblia desenterrada" Siglo XXi de España Editores. Madrid, abril de 2003.

Saludos.

[Leviatán]

Hola,

Pues coincido plenamente contigo, Josemari. Naturalmente, no inventamos ni desubrimos nada al exponer esto. ¿Qué se puede decir, sino de los grandísimos paralelismo entre los textos de Ajenatón y el Salmo 104, por ejemplo?

Y es que los textos del Antiguo Testamento están profundamente influidos por las formas (y los fondos) de no sólo la cultura Egipcia sino también de la poderosa influencia Mesopotámica.

No obstante hay que valorar el Antiguo Testamento, en mi opinión, como el único texto que nos ha llegado prácticamente íntegro de la forja de una nación con las tradiciones culturales de la zona, algo adúlteradas para asimilarlo por un pueblo nómada.

Recomiendo otro libro:

La arqueología y la Biblia, Editorial Crítica. Autor: Laughlin

[mipegi]

Tenemo que ser conscientes quela biblia no es un texto histórico sino religioso y no se puede acatar al pie de la letra. El éxodo no tenía porque heber tenído unas cifran muy grandes, pero la tradición oral lo fue exagerando, simplemente era tan poco importante que no alteró la vida en Egipto, tal vez solo marchó un linage o una familia. Respecto al reino de Israel si que tuvo cierta importanci pero no como una potencia militar sino tal vez un poco comercial por el control de rutas. El auge de Israel es dado por un vacio de poder y una ausencia de un imperio militar que le parara los pies.

[Leyendas]

Coincido con vos, pero yo creo q el exodo y muchas historias mas de el AT son ficcion, mitos, leyendas...no hay pruebas de un exodo israelita, de patriarcas, de habraham de ur, es parte de todo el folclore religioso...recordemos q los hebreos llegaron a Palestina en el siglo 13, 12 AEC (antes de la era comun), fueron muchos siglos politeistas, henoteistas....
Por ejemplo el mito del diluvio es una leyenda sumerio-babilonia, asi como el monoteismo importado de la huella q dejo el controverso Akhenaton, en fin...influencias de culturas avanzadas (egipto, sumeria, babilonia, asiria, persia, Cananeos) sobre un pueblo atrasado, barbaro y nomade q absorvio la cultura y las caracteristicas a su manera de estos pueblos...
Respecto al tema de la prosperidad de israel, nunca fueron grandes militarmente, excepto en sus esfuerzos para asentarse en palestina, y mantener cierta unidad hasta la conquista romana...
En fin, Egipto: la cuna de la civilizacion occidental y oriental.

[juan carlos moreno]

Queridos amigos,
Desde hace una veintena de años la arqueología de Israel ha demostrado cómo el relato bíblico no puede ser considerado una descripción válida del origen de Israel. Numerosos investigadores han insistido sobre las consideraciones ideológicas que impulsaron a ciertos letrados judíos a escribir algunos de los libros del antiguo testamento. De ahí que para cada vez más historiadores la cuestión de los orígenes de Israel debe estudiarse a partir de las mismas premisas científicas utilizadas con cualquier otra civilización del Próximo Oriente antiguo: recurso a la arqueología, a las fuentes escritas descubiertas en el transcurso de las excavaciones, a las menciones en fuentes de la época (textos asirios, egipcios, etc.). Y frente a la reconstrucción histórica así obtenida se debería contrastar el texto bíblico para averiguar cuándo y por qué fue compuesto, quiénes fueron sus autores y qué contexto histórico, social, político y religioso determinó su composición. El libro que cita Josemari es un muy buen resumen del estado actual de los conocimientos en este campo. Otro investigador que también ha realizado contribuciones muy importantes es Mario Liverani, quien ha publicado recientemente un libro en italiano sobre la misma cuestión: Oltre la Bibbia. Storia antica di Israele, Laterza, Roma-Bari, 2003.
Las consecuencias para la Egiptología también son importantes, ya que estas investigaciones, sobre todo en el terreno de la arqueología, ayudarán a comprender mejor la situación política, del poblamiento, etc., en la Palestina dominada por los faraones del Imperio Nuevo. También permitirán conocer mejor el proceso de disolución del imperio egipcio en esta zona así como una cuestión fundamental: la existencia de períodos alternos en que la vida urbana desaparece en una zona determinada del Próximo Oriente antiguo para dar paso a una época de predominio del pastoralismo. Por último, creo que también se avanzará con firmeza en el conocimiento de los contactos históricos entre Palestina y Egipto, sobre todo en lo que respecta a la penetración e instalación en territorio egipcio (el Delta sobre todo) de pastores asiáticos. La imagen transmitida por los textos egipcios de un sólido control de los faraones sobre las fronteras del país es engañosa. Se trataba, como revela la arqueología, de una frontera porosa, y la instalación de pobladores asiáticos en un Delta escasamente poblado fue probablemente favorecida por la administración faraónica para aumentar la producción de esta zona. El hallazgo reciente de dos templos de finales del Imperio Antiguo en el Delta oriental, cuya planta es muy similar a la de algunos santuarios sirios y palestinos, sugiere que ya en el III milenio vivían en esta zona asiáticos, quizá instalados como mercenarios por los faraones de la VI dinastía. Es una situación que recuerda a la vigente desde el Imperio Medio en Tell el-Daba, con lo que se demostraría que la presencia asiática en el Delta oriental fue un fenómeno habitual de la historia de Egipto y que la imagen de invasiones repentinas o incluso de conflictos étnicos entre egipcios y asiáticos debe ser rechazada.
Saludos a todos,
Juan Carlos Moreno García