EGIPTODiario de un viajeLunes 20.08.2007:
Vuelo al fin hacia Egipto. La Tierra de los grandes Faraones. El País del Fuego.
El vuelo 405 de Air Europa contratado por Travelplan vuela hacia Luxor sin ningún tipo de problemas. Hemos sobrevolado Italia, Grecia y como no, parte de Egipto (es inconfundible). Son las 18.00 h. hora local y veo a kilómetros de distancia por encima del suelo la silueta del Nilo.
El Nilo, que río más grande. Desde la antigüedad lo veneran y lo adoran. Gracias a él Egipto vive, gracias a él come, y gracias a él avanza (en la actualidad poco a poco).
Aterrizamos. De pronto, un gran aplauso se adueña del avión. Está claro que en este vuelo hay españoles (creo que somos los únicos que aplaudimos en los aterrizajes). Es nuestra manera de dar gracias por haber llegado sanos y salvos a nuestro destino, Egipto.
Descendemos las escaleras del avión y CHASSSSS! Un bofetón de calor envuelve todo nuestro cuerpo (para que os hagáis una idea es como la cortina de aire frío que hay en las puertas de El Corte Inglés aunque en sentido inverso). Entramos en la terminal del aeropuerto, es pequeñita. Somos un montón de españoles con un montón de ilusiones llegando a este país maravilloso. Según llegamos oímos los gritos de los representantes turísticos:
-Los de Royal aquí……..conmigo los de Travelplan…… vamos, vamos-. Rápidamente pasas el control de la policía donde te ponen el visado. Rápidamente también entregas el bono del viaje al representante y él te da una cartulina donde pone el nombre del barco y la habitación que te ha tocado. También te da unas pegatinas para que las pongas en la maleta indicando el barco y la habitación que te corresponden. Lo escribes y pegas las etiquetas en la maleta. Rápido, rápido, todos al autocar que nos trasladará al barco. Cuando llegas al autocar le das las maletas a un señor que las coloca en el maletero del autocar. Nos pide propina. Le decimos que no………..y………….. OJITO CON LA JUGADA!!! Sin tú darte cuenta el “asquerosillo” te quita la etiqueta en señal de venganza y como no estés pendiente de ella ya la has liado, así sin comerlo ni beberlo.
Nosotros ajenos a este último detalle nos subimos al autocar. El representante empieza a cobrar los visados. Son 36 € por persona. Le digo que me haga un papel conforme lo pago y me dice que ya está en el pasaporte. Miro el pasaporte y me pone 15 $. Conclusión: os lo imagináis no?? El que cobra el visado se lleva un pellizquito, en fin decides no decir nada más y dejarlo como está.
Llegamos al barco, está en medio de nada, en medio de una carretera dónde hay 2 o 3 viviendas. Me acuerdo de un forero. Dijo que estaríamos cerca del Templo de Karnak.
Pues me da que va a ser que no…….
Nuestro barco es el Nile Crown 3
apendice-del-diario-a-egipto-de-alis-t2750.html#p13522 . Bajan las maletas del autocar y es cuando nos damos cuenta de la jugada de la pegatina. El representante nos indica donde está nuestro guía y que vallamos hacia él. Por supuesto nosotros no estamos por la labor porque lo que queremos hacer es transmitir a qué habitación tienen que llevar nuestras maletas. Al final nos entendemos pero lógicamente hemos perdido al grupo y al guía.
Hay cuatro barcos estacionados en paralelo. Sus recepciones se conectan. Entramos en el primero, están de restauración. Pasamos al segundo el Nile Crown 1. La recepción es clavada a la anterior pero su decoración está pasada de moda. Pasamos al tercer barco el Nile Crown 2, la recepción es otra calca pero éste está muy bien. Y por fin el Nile Crown 3 que es idéntico al 2. Pedimos las llaves, nos suben las maletas. Vamos a la habitación para comprobar que esté en orden. Su situación dentro del barco es justamente en la mitad (está bien). Las habitaciones son justas y los lavabos aún más justos si cabe y con ducha. Pero vamos, todo funciona. Hay televisión (no se pilla nada en español). Al rato empezamos a buscar al guía. Encontramos un grupito de hombres haciendo una tertulia con pinta de guías.
-Perdón estoy buscando a mí guía…. -.
-¿Sois la habitación 727?-.
-Sí-.
-Joer me pensaba que no habíais venido en el avión. ¿Dónde estabais?-. Bueno, le explico lo que pasó y listo.
Nos explica un poco como va a ir el viaje.
Cada día habrá en el tablón de anuncios el programa del día. La hora del desayuno, la hora de las visitas…….
Le pregunto si va a proponer esa misma noche como visita opcional el Luz y Sonido de Karnak (25 €) (es que era el único día que había sesión en español). Me dice que no, porque de los cuatro espectáculos que hay en el país es el peor. Qué más adelante ofrecerá el de Philae y Pirámides (el de Abu Simbel ya lo llevamos incluido en el tour). Le comento que me gustaría ir y me dice que me busque un taxi (le pido que si me lo puede llamar él y me dice que no) y en gran medida me intenta disuadir de que vaya.
Después de unas breves palabras la situación es está:
1. Si quiero que él me llame a alguien me tiene que cobrar los 25 € que vale la opcional.
2. Si quiero ir por mi cuenta allá yo, el tiene la deferencia de dejarme libras para pagar el taxi y las entradas.
3. Me advierte que los taxistas son muy folleros y que me intentarán llevar a tiendecitas para que compre cosas. Me aconseja de que cuando contrate un taxi le diga que no me espere, que le pague y se vaya y que luego allí coja a otro o si no me liará con alguna triquiñuela.
4. Me aconseja de no pagar más de 30-40 libras (3,90-5,20 €) al taxista y me confirma el horario del programa:
Espectáculo de Luz y Sonido Karnak Español - Lunes 22.30 h.NOTA IMPORTANTE: Los horarios de los espectáculos no coinciden con los que ponen en la web oficial de la empresa encargada en gestionar estos eventos (pa cargarte directamente).
Acabamos de hablar con él y le pagamos el canon de propinas para todo el viaje que es 30 € por persona. El nos deja 3 billetes de 100 libras = 300 libras.
Vamos a cenar. Cuando entras en el comedor un camarero te pide el nombre de tu guía. Nos guía hasta una mesa de 8 personas y nos dice que nos sentamos donde queramos (porque aún no había llegado nadie) y que a partir de ahora siempre nos tendremos que sentar en esa mesa. Pues vale.
La comida no está mal, hay arroz, hay pollo, hay pescado, hay patata, hay vegetales….
Los postres generalmente, son: fruta (melón, sandia, higos, una especie de pera….), una imitación a nuestros flanes y pastelitos. Bien.
La bebida la pagas a parte (bueno te la apuntan a tu habitación).
La mesa se llena de gente, una parejita joven de Madrid, otra gallega y otra no tan jovencita también de Madrid. Con ellos comeremos los 4 días que estemos en el barco (aunque luego te hagas amigos de otras personas).
Después de cenar y después de hablar con mi marido bastante rato (a él eso de ser el primer día, no conocer a nadie, no saber el idioma, de noche….. no le anima nada) le convenzo para ir a Karnak de noche por nuestra cuenta. Salimos fuera del barco y hablamos con un taxista. Cómo sólo llevábamos billetes de 100 libras decidimos ofertar en euros: 5 €. Al principio se resiste pero al final nos lleva. Es un hombre mayor.
Narices!!! que lejos estaba el barco de la ciudad. Entramos en Luxor, bueno en la zona que ellos llaman el Nuevo Luxor. A orillas del Nilo. Ahora me doy cuenta de todos los barcos que hay dentro de Luxor. Me acuerdo de un forero de nuevo, supongo que él se refería a que, si estabas anclado en esta zona, si que se podía ir a pie a Karnak.
Mientras vamos el taxista nos comenta que nos espera y nos trae de vuelta. Le digo (según indicaciones de mi guía) que no, que no. El casi implora el porque no y al final nos da pena y le digo que si es por otros 5 € que vale, pero que directos del templo al barco.
-No problem, no problem……-. La forma de conducir del “jabibi” ni os la cuento. Carril derecho, carril izquierdo, doble línea continua en medio. ¿Os imagináis por donde circulaba jabibi………? por el medio, chicos, por encima de la dos línea continuas, pa chulo pa chulo: yo, joer…….
Antes de llegar hace una parada técnica para confirma a que hora termina el espectáculo. Nos dice que a las 23.45 (dura 1.15 h.). Nos dice que quedamos en el parking de coches entre las 23.45 y las 00.00 h. Mi marido intenta pagarle el trayecto de ida y no lo consiente, dice que todo al final.
Para los que aún no habéis estado de noche, os tengo que decir que delante del templo hay una gran gran gran explanada (para los que habéis estado ya sabréis de lo que os hablo).
Y no hay ni una mísera luz. Todo esta oscuro. Divisamos el templo de puro milagro.
Ya estamos allí, son las 21.30 (fuimos con tiempo). Nos comentan que las entradas las empiezan a vender 30 min. antes de que empiece el espectáculo (22.00 h). Pues nada a esperar toca.
No hay nadie, solos como la una. Se aproxima una parejita. Son uruguayos y entablamos conversación con ellos. Nos explican un montón de cosas porque ellos ya han visitado todo el país.
Son las 22.15, abren las taquillas (la puntualidad brilla por su ausencia), 75 libras (9,75 €) por persona. Se une a nosotros un grupo de turistas españoles que vienen traídos por su guía (como debe ser). Empieza el espectáculo………… aquí si que me vais a perdonar pero no lo voy a explicar por dos motivos: los que ya lo habéis visto es obvio y los que no, pues para que os sorprenda. Simplemente os diré la dinámica del espectáculo: una primera parte caminando por el templo iluminado y luego una segunda parte sentado en una mini tribuna donde también se explica parte de la historia en general de Egipto. Personalmente se me hizo algo largo pero supongo que era porque estaba cansada. Había sido un día muy largo: madrugar, el viaje…….
Una nota: nunca he visto una luna tan bonita como la que vimos desde la tribuna. Roja, roja, roja, y muy baja, increíblemente baja, hasta el punto que desaparecido en el horizonte escondiéndose bajo el suelo. Maravilloso (bueno hubiera sido más maravilloso si me hubiese llevado la cámara de fotos pero no me atreví, otra vez será). Si podéis llevaros la cámara chicos, merece la pena.
Se acabó el espectáculo. Al grupo lo recogió su autocar, y nosotros nos disponíamos a ir caminando al parking. Estaba todo negro y a lo lejos se divisaba un hombre con una chilaba blanca.
-Ese de allí ¿no será nuestro taxista?-.
-No se-. El hombre empezó a mover los brazos en forma de aspas y efectivamente era nuestro taxista que nos estaba llamando. ¿Un detalle no os parece?
Nos dirigimos al parking y sorpresa!!! No había ningún taxi más!!! menos mal que nos ha esperado (me acorde en toda la familia de mi guía). Nos subimos y oímos a lo lejos unas voces. Eran la pareja de uruguayos que estaban en el espectáculo.
-Por favor, por favor, ¿os importaría compartir el taxi? es que no hay ninguno y nuestro hotel os queda de paso- (les habíamos explicado donde parábamos).
-No hay ningún problema hombre, subir que nos lleve a todos-. Esta parejita le pagó 20 libras al taxista, nos despedimos de ellos y seguimos hacia nuestro barco. Llegamos y le pagamos. La verdad es que el tipo se había portado bien y aunque habíamos acordado 10 € le dimos 12 € en agradecimiento.
-Thank you jabibi, thank you-. Y nos fuimos a dormir que al día siguiente tocaba madrugar.
Y este ha sido el relato de nuestro primer día en Egipto. Buenas noches……