por NANCYKAT » 17 Abr 2010, 01:32
Hola!
Muy buena la exposición de Julián de la teoría de la reencarnación o la reincorporación, sin embargo a mi entender los egipcios estaban obsesionados con la idea de la vida ultraterrena y la renovación, pero no de la reencarnación. Son dos conceptos diferentes. Desde que Osiris fué el primer mortal resucitado, todo egipcio aspiraba a la resurección y a la vida eterna en el reino de Osiris y si no pasaba las pruebas a que era sometido en el más allá, desaparecía totalmente, no había posibilidad de volver a la tierra e iniciar un nuevo ciclo vital.-
Un poco distinto era el caso del faraón, el faraón poseía algo llamado Ka Real, que no era otra cosa que fuerza vital de Horus que se transmitía de sucesor en sucesor. Por eso se ha dicho en algunos contextos que cada faraón era Horus reencarnado. Pero puesto que la reencarnación supone inmortalidad y los dioses, incluído el faraón, no eran inmortales, entiendo que era renovación. En el momento que el heredero asumía el Ka Real, la institución faraónica se renovaba y él se convertía en Horus mismo y era un Horus resucitado, no reencarnado. De todas formas el tema es bastante discutido en egiptología, porque hay abundancia de textos y los egipcios no eran dogmáticos para nada. Así que vuelvo a decir, que no he leído que los egipcios creyeran en la reencarnación, pero no descarto que en el pensamiento egipcio pudiese existir algo por lo menos parecido a la idea de la reencanación (y a mí me queda muchísimo por aprender todavía).-
Otra consideración a tener en cuenta es que la concepción filosófica de la vida en el más allá tuvo variaciones en los períodos históricos. En el Reino Antiguo la posibilidad de una vida ultraterrena sólo estaba reservada al faraón y unos pocos allegados. Desde la VI dinastía comienza a cambiar y a partir de la crisis del Primer Período Intermedio, el privilegio se hace extensivo a todos.-
Así que si se han encontrado biberones en tumbas egipcias, no creo que sea por la idea de que el muerto o el alma del muerto se reencarnara en un niño, sino más bien por la costumbre de enterrar al difunto con aquellos enseres que podían serle útiles en su vida en el más allá o los objetos que para él tuvieron un significado o "valor sentimental". O simplemente porque se tratara de tumbas familiares y fuera una ofrenda para el Ka de algún infante sepultado allí. O una cuestión simbólica relacionada con el alimento de los dioses.-