Son las 6,30 y, pese a la hora a la que me dormí, ya estoy despierta y salto de la cama, lo primero que hago es mirar el Nilo y constatar que lo que tengo debajo es un algo tipo fabrica de algo. Pero bueno paso y hago fotos a la montaña tebana y a los ¡dos globos!
, solo dos ¡mi abuela! pero si a estas horas el cielo estaba poblado de ellos... y además me da la impresión de que los hacen volar como reclamo y que no hay nadie en ellos. Me pienso si subir en uno, pero llego a la conclusión que no voy a tener tiempo a todo y que mejor hago las cosas con calma que si no me saturaré y terminaré siendo
"chinito con Nikon" Bajo a desayunar ¡jolin no hay nadie! bueno vale me siento y descubro unos manteles chulisimos, tengo que llevarme uno
Un camarero me pregunta si te o café, le digo que chocolate y me mira con cara de paisaje así que se lo repito despacito
"cho-co-la-te", aclaro que hablaba en español salvo honrosas excepciones, a ver porque estando en Egipto voy a tener que hablar en ingles, no quiero ¡hala!
Bueno el hombre me dice que el chocolate lleva recargo ¿que? ¿desde cuando?
siempre he pedido chocolate para desayunar y nunca me han dicho nada de recargo, lo apunto mentalmente para decírselo al representante pero de momento le digo que bueno, que no me importa. El buffet es un poco deprimente, pero no me extraña porque debemos ser poquisimos en el hotel, además total para lo que yo desayuno pues ya me vale.
Me traen el chocolate que, pese a la costumbre egipcia de que sean solo agua, está bastante bueno, mira por lo menos merece la pena aunque lo tenga que pagar aparte. Me traen la cuenta del chocolate, 12 LE, tampoco es para gritar la cosa, aprovecho para cambiar y le doy un billete de 50, cuando me traen la vuelta y, haciéndolo muy mal, le doy directamente 5 de propina al camarero antes de contar la vuelta, este me mira con cara rara y me dice por señas que ya se había quedado por su cuenta las 3 LE sueltas ¿que?
como no me voy a poner ahora a quitarle las 5 que le he dado ni a pedirle las 3 que se ha quedado por su cuenta lo dejo de momento, pero este no sabe con quien se acaba de jugar los cuartos el tío jeta
Bajo a recepción y ya me está esperando mi representante, le digo que la habitación no es la que yo llevaba y que pida el cambio, me pregunta que si no se ve el Nilo, yo le digo que si que se ve, de lado, y que esa no es la que yo llevaba. Habla con el tío de recepción, un tío por cierto que parecía se habia tragado un palo o que le debian y no le pagaban
, que tío mas sieso, pero si vamos a ser siesos a mi no me gana absolutamente nadie
, pues bien va el "tieso" y dice que me ha dado la habitación que mas cerca esta del Nilo porque yo no llevaba habitación con vistas al Nilo
, le digo al representante que de eso nada que precisamente yo llevo habitación con vistas al Nilo si o si, el representante pone caras y me dice que si estoy segura
"¿que si estoy segura? no tienes mas que mirar el bono ¡rayos!" me caliento yo que no tengo paciencia cuando me quieren colar lo que no es (bueno y en general tampoco para nada),
"vale, no te preocupes ahora llamo a mi jefe de El Cairo y cuando volvamos de la visita te cambian la habitación, no vamos aperder el tiempo ahora" dice el representante y se lo dice en árabe al de recepción que pone cara como si se le hubiera reventado un furúnculo
Salimos y me presenta a mi conductor, un tío muy majete llamado Sayed, también me presenta mi trasporte, tengo un monovolumen de 9 plazas ¡juas! puedo ir cambiando de asiento si me aburro
Me dice que recogeremos al guia en la otra orilla porque vive allí, pues vale. Vamos caminito de la orilla de los muertos y yo mirando por la ventanilla como un peazo búho mientras el representante intenta pegar la hebra preguntándome generalidades y yo, amable como siempre, le contesto con monosílabos porque solo quiero mirar el paisaje y me está distrayendo jolín
Ahora pretende que le salude al guia en árabe en plan gracieta para que el otro se piense que yo lo entiendo, le digo que solo se decir salam aleikun (o como se escriba) y que ya tengo bastante con eso ¿es que este se cree que yo soy una turista y me va a dar la paliza con tonterías de estas? pues lo va llevando clarito
Recogemos al guia, presentaciones y demás, este por lo menos está aleccionado y sabe que ni es mi primer viaje ni soy una turista de las que no tienen ni idea y le gustan las bobaditas (bueno el representante también lo sabe pero no ha cambiado el chip todavía) En ese momento no me di cuenta pero tanto el representante como el guia son dos armarios de tres cuerpos, osea grandotes, no se si me los han puesto a posta. Nos dirigimos al Valle de los Reyes, la emoción me corre por el cuerpo, es como un hormigueo que empieza en los tobillos y va subiendo, que me deja un vacío en el estomago y hace que los ojos se me llenen de lágrimas según voy reconociendo el camino. Mi guia me alecciona sobre los vendedores, que no mire nada si no me interesa porque no me los podré quitar de encima, que solo si quiero algo me pare y mire, le digo que no creo que me pare para nada.
Ya está, bajamos y se me ponen uno a cada lado, es cuando me doy cuenta del tamaño que tienen ¡ja si casi no se me ve!
Entramos al centro de visitantes donde hay unos cuantos turistas desperdigados, son ... ¡franceses! ¡por Seth no lo puedo creer!
Llegamos a las taquillas, solo hay 6 tumbas abiertas además de las de Tut y Ramses VI que son de pago aparte, y además lo que han hecho es tener abiertas únicamente las que estan digamos en el centro y cerca de la entrada, osea: Ramses III, Ramses I, Merenptah, Ramses IV, Ramses IX y Ramses VII, mira tu, todos los Ramses. Por supuesto nada de la de Horemheb que es que no voy a conseguir verla nunca ¡que porras!
Pasamos por la tumba de los hijos de Ramses II, siguen las excavaciones en ella pero de momento está cerrada, no hay ninguna excavación en activo desde el principio de los líos. Bueno la primera a visitar es la de Ramses III, el guia me cuenta alguna que otra cosa y allá que voy. Como no podía ser de otra forma, los franceses deciden también que es la tumba que mas les apetece y se meten después de mi, los dejo pasar pero son ruidosos como una plaga de pregoneros. Me digo a mi misma que en mi primera visita a Egipto debí hacer algo muy malo y un dios o un faraón o ambos se cabrearon conmigo y me mandaron una maldición ¡los franceses! aunque vaya al sitio mas recóndito me los voy encontrando siempre
Según bajo observo que los laterales deberían protegerse porque todo el mundo puede tocarlos y seguro que lo hacen. Curiosamente ya no se puede dar la vuelta a la sala de los pilares. Los vigilantes se afanan intentando enseñarte cosas insospechadas, como yo paso del tema se dedican a los franceses. Para unas risas (histéricas) en un momento dado se va la luz cuando todo el mundo está en la parte interior de la tumba donde no se ve ni flores, menos mal que viene al poco porque podría haber pasado de todo, la gente en vez de quedarse quieta empezó a intentar salir y se daban con las barandillas, mira que son torpes ¡por Ammit!
Salgo y observo a ver donde se van los franceses con el fin de evitarlos, le digo al guia que me voy a Ramses I, me intenta explicar algo pero le digo que no, que aprovecho ahora que los franceses están distraidos por otro lado, que ya me lo contará luego (después de todo yo llevo mis apuntes) Y entro, bajo, bajo ... y no hay nadie
siento que el estomago me hace cosas raras (el pino y similares) solo está el vigilante que intenta enseñarme cosas del sarcófago, o de las paredes, o de ... y yo le ignoro olimpicamente, tengo mi pequeña linternita colgada del cuello y con ella recorro despacito el enorme sarcófago del faraón, no había podido hacerlo nunca. El vigilante se cansa y pasa de mi y yo ... voy y me siento en todo el medio de la tumba, bueno en el medio no que está el sarcófago, pero todo lo en medio que puedo, y contemplo las pinturas maravillosas y las lágrimas se me caen a lo tonto, miro las escenas y las vuelvo a mirar ... y no oigo nada, nada, solo el paso de la historia. Entonces digo el nombre de mis amigos, como no hay nadie lo digo en voz alta y el vigilante me mira como si me hubiese dado un algo pero a mi me da igual, tenia que recordarlos a todos porque los llevaba conmigo, tenia que decirle al faraón que no era yo sola la que le estaba visitando que mis amigos estaban también allí y le presentaban sus respetos. Si alguien pregunta porque lo hice y porque allí no sabría decirle, solo se que eso fue lo que me pidió el cuerpo, y si, estoy muy chalada.
Por fin conseguí arrancarme de la tumba de Ramses I, al salir mi guia me dijo que mejor entraba ya en la de Tut porque tiene un horario restringido y no fuera que la cerrasen, supongo que después de ver el tiempo que me había tirado en la tumba pensó que nos podían dar las uvas a ese paso
Así que allá voy, estoy en el interior de la tumba, como no podía ser de otra forma hay cuatro franceses dando por saco dentro, bueno echo mano de mi poca paciencia y mientras ellos miran atontados las paredes me voy hacia la urna donde tienen a Tut. En realidad no se que sacan teniéndolo aquí, apenas se ve porque está en un rincón muy oscuro y con una iluminación tan tenue que no sabes que porras estás viendo, como yo llevo la linterna al cuello la utilizo para ver al faraón un poco mejor ¡por todos los dioses del inframundo, está fatal!
la momia está en pésimas condiciones, tiene toda la pinta de ir a deshacerse en cualquier momento, tiene toda la piel craquelada (no se si este termino es aplicable a una momia) está mas que negra y ... se la ve tan frágil. Miro a los ojos del faraón (bueno a donde deberían estar) le miro a la cara y es como si estuviese pidiendo por favor que le dejen descansar, que le lleven con los otros faraones, que lo tengan en un lugar adecuado para que su cuerpo pueda pervivir por la eternidad, que no lo tengan ahí exhibido en una urna ...Tengo ganas de gritar, aporrearía a Hawass por esto, no puede tener así a Tut, no y no, no lo puede exhibir en esas condiciones como si fuera una mercancía, sin darme cuenta estoy pateando el suelo y los franceses y el guarda me miran alucinados, ya la estoy montando así que procuro calmarme, en cuanto vuelva a casa me pongo a escribir a quien sea para que se lleven a Tut de aquí y lo tengan como debe ser ¡anda que no!
Me pongo a mirar la tumba y constato que los hongos se están comiendo las paredes literalmente, veo algunos trozos a punto de caerse ¿pero no iban a curarla? ¿no se iba a cerrar para eso antes que a Don Sombrero se le ocurriese la feliz idea de cerrarla para siempre? ¡pufff! salgo de la tumba totalmente descompuesta, con tal cara que mis saladinos (guia y representante) me preguntan si me encuentro bien, si necesito algo, si quiero agua ...
"no , no quiero nada, solo que traten a Tut como se merece en vez de tenerlo ahí como un bacalao" estallo y ellos se miran como pensando que vaya tía loca que les ha tocado.
Respiro hondo, hondo, recuerdo que tengo que disfrutar y que ya me cabrearé después. Con mejor animo entro en la tumba de Merenptah, saco apuntes y libretilla para ir apuntando las cosas que quiero mirar después o cuando vuelva. Me llama la atención un cesto con patas, me lo apunto para mirar que es, y también veo una especie de fórceps con patas también, que curioso, Los vigilantes siguen persiguiéndome para enseñarme cosas, este me quiere dejar su linterna para que mire la tapa del sarcofago, le enseño la mía que llevo al cuello y pone caras. Me siento en las escaleras para mirar bien, estoy sola, ahora si que si, ni franceses ni su prima, toda la tumba para mi ¡oh mi abuela! no lo puedo creer. No se cuanto rato pasa porque pierdo la noción del tiempo al final salgo y ... no hay nadie, los vigilantes y mis saladinos pero cero turistas ¡oh por Nut!
Mi guia me dice que como es viernes tienen que ir a hacer sus oraciones, que hay un lugar para rezar allí al lado y que si no me importa, a mi no me importa absolutamente nada, que recen lo que quieran, le digo la secuencia en que voy a entrar en las tumbas para que estén informados y no se desesperen pensando que me he perdido o algo. Así que entro en Ramses IV, IX y VII, y allí estoy sola, bueno con los vigilantes, y es entonces cuando puedo oír a los faraones, a los sacerdotes, oigo las invocaciones, oigo las plañideras, huelo los inciensos ... en varias ocasiones tengo la piel de gallina, en algunos momentos siento un ligero miedito (soy muy miedosa) porque en las dos ultimas tumbas los vigilantes, visto que no les hago ni caso, se salen incluso fuera.
Y yo soy tan feliz que no lo puedo creer, me olvido de todo lo que no sea vivir cada una de las escenas que veo, incluso hago alguna invocación a los dioses, sonrío a los faraones, acompaño a los sacerdotes, sigo apuntando en mi libretilla pero creo que es casi automático porque después leo lo que he apuntado y no recuerdo haberlo hecho, es tan maravillosa la sensación que no puedo casi respirar o quizá es que se me olvida hacerlo, no quiero perturbar el silencio.
Cuanto me cuesta salir de la ultima tumba, pero hay que ir al Valle de las Reinas y se echa el tiempo encima. Mis saladinos están de charleta y me dicen
"¿ya está, has terminado?" "no, no he terminado, me quedaría aquí dias enteros, pero tenemos que movernos, así que no me queda otra" digo tristona. Salimos por la parte de las tiendas y los vendedores se acercan pero yo voy en medio de los dos tiarrones y es difícil que lleguen, ellos van diciendo que no quiero nada y ya está, encuentro que esta vez son menos pesados lo mismo es que están perdiendo practica, por un lado me da pena pero yo tampoco puedo hacer nada.
Ya estamos en el coche el guia me comenta que ahora vamos a ver dos tumbas, pregunto que porque dos que si no hay mas abiertas y me dicen que la otra que solía estarlo la estaban restaurando. Es algo que no entenderé nunca ¿porque no abren alguna tumba mas si las hay en buenas condiciones? En fin, misterios misteriosos.
Llegamos y no hay absolutamente nadie, los vendedores no se lo pueden creer y reaccionan tarde, ya casi estoy fuera de su alcance ¡jus!
El guia saca las entradas y me dice que ha habido suerte, están abiertas las tres tumbas ¡bravo! Según nos dirigimos a la primera veo la entrada de la tumba de Nefertari, que recuerdos, me dan ganas de acercarme aunque solo sea a la puerta pero luego me parece un poco tonto y lo dejo correr aunque con la mente saludo a la bella reina
"te veo en Abu" le digo.
Voy primero a la de Khaemuaset, antes de entrar recuerdo la exposición de y como se encontraron aquí la cantidad de ataudes que se mostraban (bueno y los que aun seguían en los sótanos del museo de Turin) El guarda me quiere enseñar no se que pero yo le digo que ya lo veré a mi bola y saco mis apuntes y mi libretilla, me fijo en las transparencias de los vestidos y en que la carne que muestran debajo tiene un color rosáceo de lo mas feo, parece carne cruda, no me gusta el efecto
También anoto que la cabeza del príncipe niño es algo apepinada y que tiene una cierta tripilla, ambas características me recuerdan Amarna. La tumba no es muy grande y las pinturas son luminosas, creo que la han debido limpiar no hace mucho, me siento un rato para disfrutarla y frente a mis ojos Ramses acompaña a su hijo ante varios dioses, le veo como un padre preocupado porque su hijo sea bien recibido en la otra orilla, incluso llego a oír la vocecilla del príncipe recitando lo que su padre le dice primero ...
Voy ahora a la de la reina Tity, recuerdo cuando la visite, estaba en un estado lamentable con los relieves sucios y medio destruidos, sin iluminación y bastante ruinosa en resumidas cuentas. Me llevo una grata sorpresa al comprobar que está mucho mejor acondicionada, la han restaurado dentro de lo mal que está y lo poco que queda y además han puesto mamparas protectoras. Veo un curioso jero de la cara con orejas pero este tiene cara como muy fiera, me hace gracia. No estoy demasiado en esta tumba, pese a lo que ha mejorado sigue habiendo bastante poco.
Y entro en la última, Amenhirjopshef, es practicamente igual que la de Khaemuaset aunque yo creo que los colores de esta son incluso mejores, además aquí las transparencias no muestran el horrible color rosa de la otra sino que tienen un color algo mas oscuro que las partes que están descubiertas, queda mucho mejor. Es en esta tumba donde se encuentra la urna con el feto indocumentado, lo primero que te comentan sobre ella y lo primero que te quiere enseñar el guarda, la verdad es que a mi me da completamente igual, no me da ningún morbo el ver la pequeñisima momia así que le echo un vistazo y paso para desconsuelo del guarda
El príncipe aquí a diferencia de la otra aparece con pelo en mas representaciones. El sarcófago tiene polvo de siglos milenarios y la urna que lo guarda tiene aun mas, le podían pasar el plumerillo digo yo
Me fijo que tanto el príncipe como su padre tienen pintados todos los dedos de los pies, cosa que no se hacia en las representaciones porque solo se representaba un dedo, de hecho los dioses tienen los pies así.
Por fin decido que ya tengo que irme, no creo que nunca vuelva a sentir lo mismo que he sentido hoy, la sensación de estar sola en las tumbas de los faraones, poder oír el silencio, poder escuchar como la historia pasa delante de mis ojos. Estoy flotando, sigo algo anonadada aunque los vendedores se me vienen encima y estos son mucho mas pesados que los del otro Valle, pero son solo dos así que nada.
Subo al coche para ir volviendo al hotel, sigo sin estar allí porque me he quedado en las tumbas, aunque en un momento de lucidez miro y veo que llevo colgando la bolsa de la cámara, con la grande ¡y la pequeña! y entonces caigo en la cuenta que ¡no he hecho ni una sola foto!
abro la boca del mismo asombro, pero ... si seré idiota, si estaba sola, si no me hubiera costado trabajo sacar la cámara pequeña y ponerme suave de hacer fotos, pero si en mi vida voy a tener una oportunidad igual, pero ... pero nada, ni me he acordado de la cámara, ni he pensado en las fotos, ni se me ha ocurrido que lo he llevado al hombro todo el dia, estaba disfrutando tanto, estaba en otra dimensión, estaba con los faraones, con los dioses con los sacerdotes, estaba en el Antiguo Egipto, y en el AE no había cámaras